Normalmente como es el caso en elecciones presidenciales el voto de los candidatos a ese cargo determina en general el voto simultáneo a otros cargos como senadores y diputados federales. Pero en cuanto a diputados locales, presidentes municipales o alcaldes, el voto tiende más a inclinarse por los personajes que participan en estas contiendas.
Si bien el electorado no está acostumbrado a votar cruzado o sea, definir su voto a favor de cargos federales diferenciado de los cargos locales, el hecho de que sus autoridades inmediatas en su localidad conocen muy bien su historia política y personal y esto termina por ser determinante en su intención de votar.
Adicionalmente tanto a nivel federal, como estatal, se busca por parte del partido o frente gobernante, la posibilidad de contar con mayoría absoluta en cámaras para asegurarse gobernabilidad desde su visión de alinear políticas y leyes a los programas o tendencias de gobierno.
Por otra parte, la necesidad de mantener registro en los partidos pequeños obliga a ir solos en la contienda a diputados, porque es en este tipo de elección donde se determina el porcentaje de sobrevivencia.
Aún no conocemos en el porcentaje de las alianzas en cuanto a distritos federales y locales. Pero es claro el esfuerzo que tendrán que hacer los institutos políticos minoritarios por buscar perfiles adecuados y con capacidad de triunfo para no solo poder ganar sino garantizar su registro.
Igualmente, los equilibrios para garantizar posiciones a los partidos aliados en un frente u otro obliga a definir candidatos de todos los colores que se unen para la elección. Esto es que
veremos en las boletas, cómo ha sido, candidatos de partidos minoritarios al frente de las coaliciones en varios distritos electorales tanto federales como locales.
Si a esto agregamos la disposición legal que permite la reelección, veremos la ratificación de algunos, cuyo desempeño ha sido responder con lealtad y eficiencia a las disposiciones del gobierno en cuanto a la aprobación de iniciativas y posicionamientos políticos.
Y desde luego hablando de reelección de alcaldes y presidentes municipales no hay duda que su futuro dependerá de los resultados observados en su gestión, porque es ahí donde el pueblo valora la importancia de su voto. Y es ahí, donde el voto si puede ser cruzado.
Por si fuera poco, en la selección de candidatas o candidatos no sólo influirá lo que corresponde a intereses de partidos o disposiciones legales, también juegan los jalones y empujones de los grupos tribus o corrientes al interior de cada partido, cosa que no es algo menor, porque de eso en mucho dependerá el acomodo de cómo ir a la contienda. Así que veremos participantes buenos o no muy buenos buscando posiciones dándose hasta con la cubeta y obligando a negociaciones y conciliaciones. Lo que bien conocemos como “operación cicatriz”.
Ese es el escenario en la selección de candidatas o candidatos. Y pasará en municipios, alcaldías, distritos federales y locales. Independientemente de los procesos de selección interna de cada partido.
Sin duda ante la insistencia de lograr mayoría absoluta o contenerla según del frente que hablemos, la defensa de cada puesto en contienda será férreamente peleado y las estrategias de integrar estructuras, movilización, acarreo e incluso compra de votos, estará al orden del día.
También tendremos discursos que busquen acercarse votos distintos a los que tradicionalmente obtienen ambos frentes. Morena y sus aliados querrán acercarse más a los segmentos de la clase media y alta, mientras que el llamado frente amplio se orientará a sumar sufragios de la base popular. Esto para garantizarse buenos resultados en teoría.
Si bien de acuerdo a datos de hoy, la lucha por la presidencia de la República favorece a morena, el desarrollo de las otras posiciones tiene sus bemoles.
El resultado de la elección en cuanto a la presidencia no será igual en porcentaje al alcanzado en la elección de López Obrador. La votación que se obtenga estará entre el 48 y el 53 por ciento y por tanto en distritos del país, los estados veremos resultados favorables a la oposición fundamentalmente en lugares de mayor actividad económica como son: CDMX, Estado de México, Jalisco, Nuevo León, Veracruz, Yucatán y algunos estados del norte del país. Y con esto puede que ninguno de los dos frentes se adjudique la mayoría absoluta en el congreso.
Aclaro, desde mi óptica no es el caso de Oaxaca, porque aquí, por las características del electorado y su afinidad con morena podría estar seguro que se ganarán la mayor parte de los municipios importantes, los 25 locales y los 10 federales. Solo
se trata de proponer los mejores perfiles y cuidar mucho el impacto que puedan tener los conflictos internos de cada partido.
Pronto sabremos qué pasará, ya no falta mucho. Sugerencia musical. A donde iremos a parar. Con Marco Antonio Solís. El Buky.
Analista y politólogo
*José Antonio Estefan Garfias
