Durante estos últimos días hemos visto infinidad de encuestas relativas a la elección presidencial del próximo año. Aunque seguramente el resultado de estas obedece a la fuente que las ha pagado, en ninguna el frente amplio su ubica por encima de morena y aliados. Y sin duda esa es una realidad.
No es mi intención promover o descalificar a una u otra virtual candidata. Mi afirmación radica en varios factores. Como son:
⁃ El alto nivel de aceptación del presidente aún en el último año que está en promedio poco más allá del 58 por ciento.
⁃ Que como alguien decía, “las elecciones se ganan con poder y dinero” y eso es más que claro con Morena
⁃ Que también una elección es trabajo territorial y no olvidemos que la estructura de morena es la más amplia e integrada en todo el país y saben hacer muy bien su chamba.
⁃ Más aún la operación político electoral se apoyará mucho en los gobiernos estatales y municipales donde morena cuenta con 22 entidades y más del 60% de las autoridades
municipales del país.
⁃ Que la fuerza electoral el día de la votación siempre la ha representado la base popular y seguramente por los programas sociales saldrá a votar en mayor medida.
⁃ Que, si bien la mayor parte de la clase media nacional puede estar en desacuerdo con las actuales políticas de gobierno, este en porcentaje es menor al porcentaje el electoral que representa el rango poblacional de menores ingresos.
⁃ Y aunado a esto, vale decir que la clase social de mayores ingresos prácticamente no sale a votar. Salvo en algunas ciudades o estados con mayor desarrollo económico. Aun cuando la expectativa es que lo hagan en mayor medida en las elecciones del 2024. Cosa que está muy incierta.
⁃ Y, por último. Que aún hay un alto apego y afinidad con el presidente como líder moral de morena y aliados con la población marginada de los centros urbanos y más claramente en el medio rural. Tal es el caso por ejemplo de entidades como Chiapas Oaxaca Michoacán Guerrero o la zona fronteriza marginada de norte del país.
Si bien, es de reconocer que aún hay importantes temas pendientes que preocupan a la población como son: la seguridad o inseguridad pública, la cobertura universal e integral de la atención a la salud, el combate a la corrupción, entre otros temas. La gente de a pie sigue apoyando la política presidencial y confiando que estos problemas serán superados de continuar con la prometida transformación de la 4T.
Adicionalmente es de enfatizar que Claudia inició su contacto en busca de respaldo desde muy temprano y esto resulta muy positivo para su candidatura. Xóchitl por su parte no tenía en su radar participar en una elección presidencial, sino iba por la CDMX y esto tiene un costo estratégico determinante. Por decirlo de otra forma: Claudia cuando entra a la contienda interna ya traía más del 50% de conocimiento y aceptación en población abierta, mientras que Xóchitl con un padrón meramente partidista no alcanza ni el 35% en el universo total de los votantes.
La solidez de Claudia entonces pesa más, que el boom de Xóchitl en los primeros días de su destape. Y por cierto, parecería que ya se estancó en ese porcentaje. Faltan 8 meses para la elección y sin duda todo puede pasar. Desde, que se cometan errores políticos en decisiones importantes, hasta que en la selección de candidatos a senadores, diputados federales, locales, alcaldes y presidentes municipales traigan consigo diferencias internas de grupos o tribus que pudieran partir internamente a ambas alianzas. Porque el caso de Marcelo parecería que ya es historia y no pudo siquiera tambalear la monolítica solidez de
morena y aliados. Mi opinión es que esto resulta remotamente posible y por tanto creo que la suerte está echada y seguramente la elección presidencial está desde ahora definida a favor del oficialismo.
Todos deseamos que nuestro país tenga un nuevo gobierno que garantice unidad nacional garantía de derechos respeto a la diversidad de todo tipo seguridad publica crecimiento
económico y desarrollo social. Ojalá así sea por el bien de todas y todos.
Y hoy recordemos la interpretación de Rocio Dúrcal con Frente a Frente.
Analista y politólogo
*José Antonio Estefan Garfias
