Oaxaca.- Desde hace cuatro años Mónica tuvo que abandonar su hogar, donde vivía con su mamá, sus hermanos y su padrastro, quien aprovechó la ausencia de su pareja para abusar sexualmente de la niña de 12 años.
Cuatro años después de haber interpuesto la denuncia ante las autoridades correspondientes, este jueves se realizará una audiencia de debate, en la que el presunto responsable, Gregorio “N”, un pastor evangélico de San Francisco Tutla, en los Valles Centrales, podría ser hallado culpable.
Ante ello, Mónica y el académico Tilemy Santiago, quien le ha dado acompañamiento en el caso, piden al Tribunal Superior de Justicia del Estado de Oaxaca (TSJEO) que el caso sea tratado con perspectiva de género e infancia, pues relatan que en diversas ocasiones, durante el proceso, la adolescente ha sido revictimizada.
Asimismo, añaden que tras la denuncia, el presunto responsable pagó una fianza de 6 mil pesos para poder llevar su proceso en libertad. Asimismo, ha presentado pruebas que no deberían tener validez, pero fueron aceptadas como parte del proceso.
El Código Penal del Estado de Oaxaca señala en su artículo 241 que el abuso sexual infantil implica una sanción de hasta cinco años de prisión y de 50 a 200 salarios mínimos.
