Lee Jung-jae, el protagonista de la exitosa serie El juego del calamar, se estrenó con éxito en Cannes como director.
El actor surcoreano es el realizador de Hunt, una cinta de espías ambientada en los ochentas del siglo XX en Corea del Sur, estrenada mundialmente en el Festival de cine de Cannes, donde fue aclamada.
Además de dirigirla, Lee Jung-jae también escribió el guion y coprotagoniza la película.
La trama está ambientada en un hecho histórico: el crimen del líder de Corea del Sur Park Chung-hee, asesinado por su servicio de espionaje en 1979 y enfrenta a los jefes de dos servicios secretos del gobierno del país asiático, un par de agentes (uno de los cuales encarna Lee) cuya misión es tratar de descubrir un topo de Corea del Norte dentro de la agencia de espionaje surcoreana.
Tras esta producción, Lee se prepara para dirigir un segundo largometraje.
Pero aunque continúe con su nueva faceta como director, Lee sigue teniendo una fuerte proyección internacional como actor tras firmar este año un contrato con la poderosa agencia Creative Artists Agency (CAA) de Hollywood. Y en 2023 volverá a la pequeña pantalla con la segunda entrega de El juego del calamar, la serie más vista de la plataforma Netflix en 90 países, en la que interpreta a Seong Gi-hun.
Marion Cotillard, productora
La oscarizada actriz francesa Marion Cotillard también experimentará nuevas facetas en el mundo del cine.
Junto al director Cyril Dion y a la productora Magali Payen, Cotillard presentó en Cannes una nueva productora internacional, de la que forma parte como fundadora: Newtopia.
La firma tiene la vocación de producir “historias ambiciosas que imaginen un mundo sostenible” explicaron los creadores de Newtopia en un comunicado.
Se trata de historias” que promuevan “un futuro deseable, ecológicamente sostenible y socialmente justo”, añadió el boletín.
Cotillard, quien está implicada en temas como la lucha contra el cambio climático, participa además este año en Cannes como protagonista de una película francesa en competencia por la Palma de oro Frère et sœur, de Arnaud Desplechin.
Protesta en Cannes
Una activista del movimiento feminista radical francés SCUM irrumpió en la alfombra roja de Cannes la noche pasada con los senos desnudos, pintados con los colores azul y amarillo de la guerra de Ucrania y el mensaje en inglés “Dejen de violarnos”.
La mujer, que fue rápidamente detenida por los servicios de seguridad tras posar para decenas de fotógrafos y cámaras de televisión, explicó que el objetivo de su acción fue protestar contra las violaciones cometidas por los soldados rusos a mujeres ucranianas desde el pasado 24 de febrero en que Rusia invadió Ucrania.
