El poderoso huracán Melissa, que tocó tierra en el este de Cuba hoy miércoles y provocó daños e inundaciones en casas y calles de la provincia de Santiago de Cuba, de acuerdo a los reportes de la agencia de noticias AFP, quienes se mantienen en el lugar.
Melissa, que llegó a la isla con vientos máximos sostenidos de 195 kilómetros por hora, inundó casas y calles y derribó árboles, postes y cables del tendido eléctrico en Santiago de Cuba. Las imágenes que ha dejado en la isla son desoladoras, al igual que las que dejó en Jamaica y República Dominicana, así como en Haití.
La tormenta también rompió cristales, paneles y otras estructuras de un hotel en el que se alojan periodistas, que aún permanecen en el interior del edificio por los fuertes vientos.

¿Cuánto daño dejó Melissa al llegar a Cuba?
De acuerdo al presidente Miguel Díaz-Canel, Cuba sufrió “daños cuantiosos” por el paso del poderoso huracán Melissa, que atraviesa la isla tras haber tocado tierra en el sureste.
Ha sido una madrugada muy compleja. El huracán Melisa sigue sobre territorio cubano. Pido a nuestro pueblo no confiarse, mantener la disciplina y continuar a buen resguardado”, agregó.
¿Por qué es considerado el más potente en 90 años?
Al golpear Jamaica el martes, Melissa fue el huracán más potente en 90 años en el momento de tocar tierra, según un análisis de AFP de datos meteorológicos de la agencia estadounidense de observación oceánica y atmosférica (NOAA).
Melissa llegó a Cuba este miércoles tras haber golpeado el martes Jamaica como un huracán de categoría 5 y vientos sostenidos de unos 300 kilómetros por hora.

El huracán del Día del Trabajo devastó los cayos de Florida en 1935 con vientos también cercanos a los 300 km/h, y una presión atmosférica de 892 milibares. Los huracanes son tormentas tropicales que se dan en el Atlántico norte y el noreste del Pacífico.
Si se incluyen los tifones (noroeste del Pacífico) y los ciclones (océano Índico y sur del Pacífico), solo la tormenta Goni, que azotó Filipinas en 2020, presentó vientos más violentos y una presión más baja que Melissa cerca de tierra firme.
Sin embargo, los datos de la NOAA no especifican si Goni mantuvo esa intensidad en el momento exacto en que golpeó el archipiélago.

Desde que la NOAA comenzó a registrar datos en 1842, el huracán Patricia, que se formó en el Pacífico antes de azotar México en octubre de 2015, tiene el récord absoluto de vientos más fuertes, con 343 kilómetros por hora, empatado con el tifón Nancy de 1961.
Pero estos récords se establecieron en pleno océano, y ambas tormentas tocaron tierra con una intensidad menor.
El tifón Mawar en 2023 fue más intenso que Melissa en cuanto a viento y presión, pero también lejos de tierra. La presión descendió hasta los 891 mb, mientras que sus vientos sostenidos (la media de las velocidades del viento en un minuto) superaron los 305 kilómetros por hora.

En el Atlántico, Dorian en 2019 golpeó las Bahamas con vientos comparables a los de Melissa y del huracán del Día del Trabajo, pero su presión era más alta, sinónimo de un fenómeno menos intenso. Al igual que Gilbert cuando arrasó Jamaica en 1988, dejando 40 muertos y enormes daños materiales.
Melissa, la quinta tormenta tropical de categoría 5 del año, superó al tifón Ragasa, que azotó el este de Asia en septiembre y que hasta ahora se consideraba el más violento de 2025, con vientos que alcanzaron los 267 km/h y una presión mínima de 910 mb.
El huracán Melissa fue rebajado a categoría 3 después de azotar Jamaica y antes de llegar a Cuba.
Según los científicos, el cambio climático está provocando fenómenos meteorológicos extremos más frecuentes e intensos en todo el mundo.
Con información de AFP


