El diputado federal Carol Antonio Altamirano presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, informó que, con la aprobación de las iniciativas de reforma a la Ley Federal de Derechos, Código Fiscal de la Federación, Ley de del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios, y Ley de Ingresos para el 2026 se tienen los siguientes beneficios.
Se proyectan ingresos por 10.19 billones de pesos, 891 mil millones de pesos más que el ejercicio anterior. Eso fortalece la acción del gobierno para el siguiente año, garantizando recursos para los programas sociales y consolidar los proyectos de infraestructura.
No se crearon nuevos impuestos ni se modificó el IVA o el ISR, evitando cargar los costos a la gran mayoría de la población.
Está fundamentado en variables económicas sólidas, como la paridad del dólar, el control inflacionario, un buen manejo del endeudamiento público y la menor dependencia de ingresos petroleros.
Servirá para atacar de manera directa el fraude de las factureras y la comercialización ilegal de hidrocarburos, en beneficio de la recaudación y del gasto público en lo que la población necesita.
Combate la evasión y la elusión fiscal y con ello aumenta la recaudación de manera justa. Se pone un freno a litigios infinitos con los que se atrasaba el pago de obligaciones ya determinadas
En 2026 el déficit ampliado será de 4.1% del PIB, menor al 5.7% del 2024 y al 4,3% previsto para el cierre de 2025, por lo que es falso que la deuda esté creciendo sin control, además de que su proporción es acorde al tamaño de nuestra economía.
Atiende las necesidades de las mujeres, al establecer tasa cero para el pago del IVA sobre diversos productos de higiene menstrual, incluyendo 2 productos que antes lo pagaban: discos y calzones menstruales.
Reduce la deducción de las aportaciones de los bancos al IPAB, con lo que se alivia la carga fiscal del rescate bancario.
Simplifica obligaciones fiscales en beneficio de personas y pequeñas empresas.
Promueve la repatriación de capitales, lo cual aumentará los niveles de inversión privada y fortalecerá el Plan México para generar inversiones y promover el empleo.
Impulsa la salud pública al desalentar el consumo de bebidas azucaradas y de tabaco.
Finalmente, aumenta la Recaudación Federal Participable y por tanto las participaciones a estados y municipios en las que estima mayor disponibilidad de recursos