Octubre se considera el “mes rosa” porque es dedicado a crear conciencia y sensibilización sobre el cáncer de mama, el tipo de cáncer más común de acuerdo con el Gobierno Federal y la principal causa de muerte en mujeres a nivel mundial.
Y es que la Organización Mundial de la Salud (OMS) prevé que una de cada 12 mujeres enfermará de cáncer de mama en algún momento de su vida, razón por la que en nuestro país se promueven de manera constante campañas de prevención y atención,ya que la detección temprana puede salvar vidas.
Cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) advierten que entre las mujeres que fallecen por cáncer de mama, 1% son jóvenes de 15 a 29 años de edad.
Aunque es más probable que las mujeres de 40 años en adelante contraigan esta enfermedad, cada vez es más común que las adolescentes y niñas desarrollen cáncer de mama, según reveló María del Carmen Romero Mimbela, licenciada en Medicina con posgrado en Psicología para Heraldo Media Group.
Es curioso y alarmante cómo ha aumentado, cómo ha incrementado la cifra de detecciones de este tipo en las primeras etapas de la juventud en las mujeres”, destacó la experta.
Por ello, dijo, “este es un buen momento para difundir el tema y hacer conciencia de que como mujeres no estamos exentas a ninguna edad”.

Apoyo multidisciplinario para niñas con cáncer de mama
La doctora Romero Mimbela contó en entrevista que es voluntaria en la asociación Amigos de Niños de Colima que se encarga de brindar atención a niñas y niños con cáncer, recaudar fondos y divulgar información sobre el tema en escuelas y hospitales, a donde también llevan material médico, alimentos y obsequios para los infantes.
Comentó que en los casos de niñas que padecen cáncer de mama, se les brinda un acompañamiento multidisciplinario que no solo es emocional, ya que además de psicólogos también intervienen trabajadores sociales y equipo médico.
Va más que nada en relación a que ellas persistan en sus actividades cotidianas, que no las dejen de lado (…) ellas se ven afectadas más que nada por el dolor físico causado por las intervenciones médicas, lo que las aleja de la actividad primordial en la infancia que es el juego”, precisó la psicóloga.
Al respecto, la experta expuso que la asociación brinda talleres con los que buscan que las niñas mantengan su estado de ánimo, por ejemplo a través de la fabricación de pelucas oncológicas. “Verte al espejo y reconocerte, es reconfortante”.
Las pelucas oncológicas son diseñadas específicamente para personas que han perdido su cabello debido a tratamientos como la quimioterapia. Generalmente son hechas a mano y son fabricadas pensando en la comodidad de quienes la usan.
Romero Mimbela informó que en el último añola asociación donó 50 trenzas y material para la elaboración de pelucas oncológicas, además de otorgar despensas al Patronato Estatal de Cancerología para beneficiar a 50 mujeres, niñas y adolescentes con esta enfermedad.

La actitud hace la diferencia
En Heraldo Media Group también conversamos con Luis Antonio Orozco Gutiérrez, fundador de LUCCA Colima, un colectivo conformado por 30 voluntarios que brindan acompañamiento emocional a niñas y niños con cáncer, durante todo el proceso de esta enfermedad.
Las visitas constantes al médico, los tratamientos y la espera de resultados conforme avanza la enfermedad, son situaciones que someten a gran estrés a estas infancias y su estado de ánimo se ve mermado.
Es por ello que mediante actividades como salidas al cine, picnics, albercadas y fiestas de cumpleaños, LUCCA contribuye al esparcimiento de las niñas y los niños, con el fin de que pasen buenos momentos que ayuden a sobrellevar su día a día.
Cuando atraviesas un episodio tan complicado como es el cáncer, hay todo un proceso de estrés que hace que la enfermedad sea más agresiva; si logramos que ellos desasocien por momentos, lo más que se pueda, su vida diaria de la enfermedad, es más probable que respondan mejor al tratamiento”, explicó Orozco.
Asimismo afirmó que LUCCA brinda contención emocional a los familiares “porque el cáncer no solamente ataca al paciente, desbarata familias en lo anímico, lo económico y en lo psicológico, de todas las formas posibles”. Por lo que, dijo, también ayudan con los relevos en los hospitales para que el papá o la mamá se vaya a descansar un rato a casa.
En la medida de lo posible hay que mantenerse en positivo porque tengo muy comprobado que la actitud hace la diferencia en un tratamiento médico”, subrayó Luis Antonio en entrevista.

¿Por qué una niña puede desarrollar cáncer de mama?
El cáncer de mama es una enfermedad que se produce cuando crecen células anormales en el seno y se extienden rápidamente, formando una masa o bulto llamado tumor.
El Instituto Nacional de Cáncer (NIH) señala que la mayoría de los tumores de mama en las niñas son benignos, sin embargoalgunos casos pueden desarrollar cáncer debido a factores de riesgo como los siguientes:
- Si la niña fue expuesta a un tratamiento con radioterapia dirigida a la mama o el tórax.
- Antecedentes genéticos de algún tipo de cáncer y que más tarde se desencadena en la mama.
- Cambios hereditarios en los genes BRCA1 o BRCA2 que aumentan el riesgo de contraer cáncer.
¿Cuáles son los síntomas de cáncer de mama en niñas?
EL NIH sugiere consultar inmediatamente con tu médico si tu hija presenta los siguientes signos y síntomas:
- Masa o engrosamiento en la mama, cerca de esta o en el área de la axila.
- Cambio en el tamaño o forma de la mama.
- Hoyuelos o arrugas en la piel de la mama.
- Pezón que se hunde hacia adentro de la mama.
- Líquido que sale del pezón, incluso sangre.
- Piel con escamas, enrojecida o hinchada en la mama, el pezón o la areola.
Estemos atentos a nuestros cambios: Romero Mimbela
La psicóloga María del Carmen Romero Mimbela alertó en entrevista sobre la importancia de ser conscientes de que ninguna persona está exenta de los padecimientos graves y estos pueden detonarse aún sin antecedentes familiares.
El mensaje que yo quisiera recalcar es que estemos atentos a nuestros cambios y que eduquemos así a nuestras infancias (…) hablar con nuestras niñas, nuestro niños, nuestros adolescentes, que cualquier cambio por minúsculo que sea tengan la confianza de platicarlo con sus padres o cuidadores (…) de ahí radica un diagnóstico oportuno”, concluyó la experta.
